viernes, 14 de diciembre de 2012




Uruguay Capital del lavado Narco 



Qué pasó con las empresas de Yabrán, a 15 años del crimen de Cabezas

La sucesión de las principales compañías que se le atribuían; el vínculo con Antonini Wilson y los Juliá
Por Iván Ruiz y Sol Amaya  | LA NACION

En los noventa, cuando Alfredo Yabrán era sinónimo de poder, su imperio era incalculable. En aquellos años, "El Cartero" se limitó a reconocer un puñado de empresas de las decenas que se le atribuían. Quince años después de la muerte de José Luis Cabezas,LA NACION reconstruyó la sucesión de las compañías más emblemáticas del ex empresario.
Poco después del suicidio, se hizo público que Yabrán había escrito una carta en la quevirtualmente designaba a HC (Héctor Colella) como su sucesor . Colella, hombre de confianza de la familia, era asesor del grupo Exxel, un fondo de inversión que adquirió por unos US$ 605 millones un paquete que incluía algunas de las empresas que se le atribuían a Don Alfredo.
Pero en la práctica, sus hijos, la viuda, sus históricos contadores y un puñado de amigos quedaron a cargo del holding. Días después de la muerte de su padre, Pablo y Mariano se pusieron al frente de las empresas, pero con el tiempo cedieron la representación formal a gente de su confianza. Melina, la hija preferida de Don Alfredo, y María Cristina Pérez, la viuda, también participaron en la sucesión, aunque en menor medida.
Francisco Gazquez Molina y Oscar Roberto Javurek, los históricos contadores del empresario ocuparon cargos estratégicos: figuraron en algún momento de la última década a cargo de dichas compañías y todavía están en el directorio de algunas.
Los movimientos societarios de los últimos años también revelan que la emblemática oficina de Viamonte 352 todavía sigue en funcionamiento.

Lejos de los procedimientos administrativos, en los últimos años las firmas despertaron la atención pública por quedar enredadas en escándalos y personajes polémicos como Guido Antonini Wilson y los hermanos Juliá.
Lanolec SA es la firma que más exposición tuvo en los medios. Esta compañía de taxis aéreos, que con el tiempo fue rebautizada como Royal Air SA, quedó a cargo de su hijo mayor luego del suicidio, cuando apenas tenía 29 años.
Royal Air fue salpicada por el Valijagate. La compañía estatal Enarsa había contratado sus servicios para trasladar a Antonini Wilson, que luego fue detenido en la Aduana de Aeroparque por trasladar un maletín con US$ 800.000. A la hora de declarar su domicilio en Buenos Aires, el venezolano escribió Viamonte 352, el mítico bunker de Yabrán y sede de Royal Air.
"Supimos por la prensa que este señor dio como su domicilio el de nuestra empresa. No sé por qué. No tenemos vinculación con él, ni con ninguno de los pasajeros de ese vuelo", se limitaron a responder desde la empresa. "Esta fue la primera vez . Esa persona no es pasajero de la empresa", agregó el vocero.
Royal Air quedó mencionada también en otro escándalo, en la causa que investiga el tráfico de 900 kilos de cocaína por parte de los hermanos Juliá . El brigadier Jose Juliá, padre de los pilotos detenidos en Barcelona, fue vinculado a la empresa de Yabrán tras su retiro de la Fuerza Aérea.
El entonces diputado Franco Caviglia y su antecesor en el cargo, el brigadier Ernesto Crespo, denunciaron a Juliá en 1991 por su presunta relación con los negocios aeroportuarios de Yabrán. Se sospechaba que Medical Jet SA, empresa que trasladó la cocaína a España, fue conformada por Juliá con la ayuda de Don Alfredo . Sin embargo, el brigadier negó conocer al empresario cuando declaró ante la comisión antimafia del Congreso en 1998.
En la actualidad, Royal Air está bien custodiada: el directorio está conformado por los contadoresGazquez Molina y Roberto Javurek, según los últimos registros.

YABITO

La firma que se dedica a los negocios agropecuarios, tuvo un papel protagónico durante la investigación por la muerte de Cabezas. El famoso sistema informático Excalibur comprobó que entre el 14 de octubre de 1996 y el 2 de mayo de 1997 se realizaron 35 llamadas desde un teléfono de Yabito a los números 345-0198 y 374-9841, que en ese momento pertenecían a Presidencia de la Nación.
También se descubrieron llamados a dos teléfonos del ex ministro de Justicia, Elías Jassan, comunicaciones con el ex diputado radical Marcelo Angel Bassani y al celular de Gustavo Prellezo, el ex oficial de la Policía bonaerense condenado por el crimen del fotógrafo.
De la sucesión de Yabito participó todo el núcleo familiar. Según la última información publicada oficialmente, la conducción es compartida por los contadores Gazquez Molina y Javurek. También aparece Leonardo Aristimunio, un joven de extrema confianza de Yabrán. Tanto él, que en ese momento tenía 25 años, como su mujer, Andrea Fabiana Viordo, fueron las últimas personas que vieron con vida al empresario en su mansión enterriana de Larroque momentos antes de su suicidio.

Narbay, la emblemática mansión del empresario en Pinamar.  Foto: Archivo
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BOSQUEMAR

La ausencia de Don Alfredo se sintió en Pinamar. Bosquemar SA, una firma dedicada a la actividad turística, supo desarrollar los proyectos más importantes del empresario en la ciudad balnearia. Bajo su órbita estuvo el lujoso hotel Arapacis, su ícono inmobiliario, que pese al paso de los años todavía está intacto.
Un poco más alejado del centro se encuentra el proyecto inmobiliario que Yabrán no pudo disfrutar: Terrazas al golf. También a cargo de Bosquemar, el emprendimiento incluía una abultada inversión en el barrio más selecto de Pinamar. El entonces presidente Carlos Menem viajó especialmente para colocar la piedra fundamental de la obra, en marzo de 1995. Sin embargo, el empresario apenas pudo conocer el comienzo de la construcción antes de su muerte.
Luego del suicidio, la sociedad pasó a manos de Pablo, su hijo menor. Con una carga de sospechas a cuestas, Bosquemar fue vendida en 1999 a Samuel Liberman , ex dueño del cable VCC y amigo de Yabrán. La operación fue millonaria: se calculan casi US$ 20 millones.
Sin embargo, los rumores indican que la operación pudo haber sido una maniobra para "lavarle la cara" a los emprendimientos turísticos en Pinamar de Yabrán tras el shock generado por el asesinato de Cabezas.
También figuró como accionista de la empresa Facundo Bunge, cuyo apellido despertaba la confianza del ex empresario. Sin embargo, Yabrán nunca pudo lograr la autorización de los Bunge para desarrollar su mega emprendimiento en la ciudad balnearia: el puerto deportivo más exclusivo de la Argentina.

AYLMER

Es otra de las compañías que también estuvo en la mira de sus enemigos políticos. Esta sociedad -que lleva en sus primeras letras las iniciales de Don Alfredo- se dedica a los emprendimientos inmobiliarios, aunque despertó interés público por las reiteradas denuncias sobre supuestas irregularidades en sus operaciones.
El escándalo se desató en los noventa, cuando el entonces ministro de Economía Domingo Cavallo afirmó que las sociedades Yabito y Aylmer eran la fachada de un holding de empresas con las que Yabrán controlaba los negocios postales y aeroportuarios.
Cavallo aportó pruebas sobre el supuesto uso de propiedades de Aylmer por parte de compañías que Yabrán negaba que le pertenecieran, como OCA, Bridees, Edcadassa, Intercargo, Interbaires, Orgamer, Ocasa, Villalonga Furlong y Sky cab, entre otras.
Desde la muerte del empresario, Pablo quedó a cargo de la compañía. En lo formal, la titularidad osciló entre sus históricos contadores y su hija, Melina..

 






http://www.presidencia.gub.uy/wps/wcm/connect/presidencia/portalpresidencia/sala-de-medios/audios/javier+liverman


Encargado del Fideicomiso Ley N.º 18.931, Javier Liberman


El Gobierno subastó en 137 millones de dólares los siete aviones Bombardier que pertenencían a la empresa PLUNA. El remate tuvo un solo oferente perteneciente a la empresa de capitales españoles "Cosmo". El evento se realizó en el pabellón de España de la Rural del Prado, el lunes 1.º de octubre de 2012.




Samuel Liberman 



Facundo Bunge 


Socios en 



El nexo


Weceslao Bunge vocero de Yabrán



Vinculos tambien con ?

Liberman/Scotiabank


File:Luis Liberman.JPG

Luis Liberman Ginsburg (1 de agosto de 1946San JoséCosta Rica) es un políticoeconomista y banquero costarricense, es el segundo vicepresitente de la República de Costa Rica desde mayo de 2010 y anteriormente se desempeñó como gerente general del Banco Scotiabank en Costa Rica y1 del país por el Partido Liberación Nacional (PLN, centroderecha).




Experiencia de Javier Liberman Jablonsky


De financiación privada; De 501 a 1.000 empleados; Sector de Banca
2003 – 2012 (9 años)
Responsabilidad sobre la Gestión Integral de Riesgos :1) Originación y adjudicación de Créditos a Instituciones Financieras, Corporativos, Pymes, Personales y Tarjetas de Créditos, 2) Recuperación de Activos , 3) Riesgo Mercado,4) Riesgo País y 5) Riesgo Operacional; así como una activa participación en los distintos procesos de venta.

Gerente de Riesgos

Credit Uruguay

1994 – 2002 (8 años)
Ingresó como Gerente de Riesgos teniendo a su cargo la tarea de rediseñar el área de
Originación y Adjudicación de créditos, profesionalizando la gestión para soportar el crecimiento y el cumplimiento de objetivos requeridos para poder asociarse con una institución de porte.



http://www.semanario-alternativas.info/archivos/2010/1%20enero/100---15.01.2010/PORTADA/paginas%20portada/MUJICA%20Y%20TOPOLANSKY%20ALMORZARON%20CON%20SAMUEL%20LIBERMAN.html


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URUGUAY
    MUJICA Y TOPOLANSKY ALMORZARON CON SAMUEL LIBERMAN
   (Montevideo Portal)

El presidente electo, José Mujica y su esposa Lucía Topolansky visitaron este viernes al millonario argentino Samuel Liberman en su residencia en Punta Del Este. En el almuerzo también estuvo presente el empresario Roberto Chiachio. Ese mediodía, Mujica llegó junto a su esposa a “La Cañada”, residencia del empresario argentino Samuel Liberman, ubicada en Punta del Este, en la zona del Jagüel.

Mujica ya había visitado al empresario en su casa del barrio Bervely Hills, durante el verano de 2008. Según averiguó Montevideo Portal, en el almuerzo estuvo presente también el empresario uruguayo Roberto Chiachio. Al salir, Mujica comentó que conocía a Liberman desde hace varios años y que si bien es un hombre entrado en años tiene muchos vínculos con posibilidad de inversión. “Yo me reúno con dios, con el purgatorio y con el diablo, siempre peleando por los garbanzos de mis compatriotas”, aclaró el presidente electo.

La relación entre Liberman y Mujica comenzó a través del ministro de Industria, Jorge Lepra. La reunión duró como unas seis horas y en ella se habló, además de posibles negocios para los próximos años, sobre la seguridad en el balneario esteño. Sobre este punto, Mujica comentó que hay que “cuidar el turismo” porque genera una actividad que aporta muchos recursos para el país, “tampoco pasarnos de la raya”, agregó.

LUNES 11 DE ENERO DE 2010 - COMCOSUR / MONTEVIDEO
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AYUDAMEMORIA
    QUIEN ES SAMUEL LIBERMAN

SAMUEL LIBERMAN, AMO DEL JUEGO, DEL LAVADO DE DINERO Y OTRAS YERBAS. 
HOTELES, BANCOS, CASINOS, CONEXIONES POLITICAS Y OPERACIONES DE LAVADO DE DINERO.
Por Horacio Verbitsky (Página/12)

También los hoteles de Alfredo Yabrán fueron vendidos a grupos empresarios de origen y composición nebulosos y de intensos vínculos políticos, cuyo rostro visible es el ex propietario de Video Cable, Samuel Liberman. Anfitrión de Menem y amigo de la mujer de De la Rúa, Liberman también se adjudicó la construcción de un hotel con casino en Mendoza. Las compañías que explotarán ese hotel y las mesas de juego son offshore constituidas en Panamá y las islas Cayman. Lejos de adoptarse medidas para controlar el lavado de dinero, del tipo de las que recomiendan las Naciones Unidas, la supervisión será bimestral y a cargo de una subsecretaría provincial de turismo.

El desguace del emporio a cuya cabeza figuró la enigmática personalidad de Alfredo Yabrán continuó este mes con la venta del hotel y del complejo de departamentos de Pinamar, que fueron origen del enfrentamiento con el gobernador de Buenos Aires Eduardo Duhalde. Igual que con otras empresas que estuvieron a nombre de Yabrán, también sus inversiones inmobiliarias en la provincia de Buenos Aires pasaron a manos de grupos empresarios de origen y composición nebulosos y de intensos vínculos políticos. Según la información brindada por el ex propietario de Video Cable, Samuel Liberman, su Sociedad Latinoamericana de Inversiones (SLI) pagó 19 millones de dólares por el hotel Arapacis y el proyecto aún sin terminar de Terrazas al Golf. Del proyecto original sólo se terminó un módulo de departamentos y hay otros dos iniciados, en distintas etapas de construcción. Pero ni siquiera comenzaron los trabajos en el centro de convenciones, el hotel de lujo y las áreas comunes al complejo, que Liberman se propone reformular, con la participación de alguna cadena internacional de hoteles y resorts.

Su costo sería de otros 20 millones. No sería sorprendente que el acuerdo terminara cerrándose con la cadena estadounidense Hyatt, asociada con Liberman en emprendimientos similares en Brasil, Panamá y Mendoza. En la licitación mendocina, Liberman se presentó como presidente de una sociedad muy anónima constituida en Panamá, Elegant Glance Corporation. La licitación convocada por el gobierno provincial para entregar en concesión el Plaza Hotel y la explotación de su casino, ha sido denunciada ante la Justicia y la Legislatura como un mecanismo para el lavado de dinero, por dos empleados del Instituto Provincial de Juegos y Casinos, Orlando Francisco Sánchez y Luis Fronceda.

También pidieron que se investigaran “posibles vinculaciones con el narcotráfico de funcionarios del gobierno y de la legislatura” de Mendoza. Entre los testimonios que ofrecieron está el del comisario de la policía local Miguel Angel Guevara, quien durante un programa de televisión dijo que “la distribución de la droga en Mendoza está en los niveles más altos, intocables”. Liberman es uno de los anfitriones frecuentes del presidente Carlos Menem en Punta del Este. También mantiene amistosas relaciones con Inés Pertiné de De la Rúa, a quien invitó a su departamento de Miami al mismo tiempo que le pedía ayuda para un negocio familiar en el Mercado Central, que dependía del gobierno de la Ciudad.

Patente de corso

La licitación para reconstruir el antiguo Plaza Hotel de Mendoza y su casino se inició durante la gobernación de Rodolfo Gabrielli y su ministro de Economía (el actual vicegobernador Jorge López) pero fue anulada, también por denuncia de empleados del Casino. El proyecto inicial fue presentado por una empresa suiza, Vetty SA, que propuso absorber a todo el personal del hotel y el casino y devolver las instalaciones a la provincia al cabo de 20 años de explotación. El gobierno solicitó una reformulación parcial de la propuesta, que Vetty presentó el 29 de julio de 1994. Pero tres días antes el empresario sanjuanino Ricardo Graffigna Bustelo presentó un proyecto idéntico en un 90 por ciento al de los suizos y solicitó ser tenido como autor de la iniciativa, lo cual le hubiera dado primacía sobre otros oferentes. “Jamás pudo realizar una copia tan exacta del proyecto, a punto tal que ni siquiera ha cambiado el orden de los numerales ni los títulos, sin la complicidad de quienes tenían en su poder el proyecto de la empresa suiza”, dice la denuncia.

Diez días después, el 8 de agosto de 1994, Gabrielli y López incluyeron la construcción de un hotel de cinco estrellas con casino en las instalaciones del Plaza Hotel en programa provincial de privatizaciones. Tanto la propuesta de Graffigna Bustelo cuanto la del gobierno provincial contemplaban un plazo de explotación de 40 años, el doble que en el proyecto suizo. Los suizos presentaron un recurso jerárquico en el que revelaron que, además de los contactos formales, su proyecto había sido discutido en forma personal con Gabrielli y López, quienes en consecuencia conocían los detalles que luego aparecieron en la propuesta de Graffigna Bustelo.

“El Poder Ejecutivo de Mendoza interpreta la ley 5507 como una patente de corso, que lo autoriza a recibir proyectos elaborados por los particulares a muy alto costo, para luego rechazarlos formalmente y quedarse con ellos a fin de establecer las bases de un concurso o de una licitación pública y hasta adjudicársela, por qué no, a algún amigo que lo presente como propio”, sostuvieron los suizos en el recurso jerárquico elevado al actual gobernador Arturo Lafalla.

Entre Panamá y Cayman

Inicialmente el pliego preveía una concesión por 35 años, renovables por períodos de 10 años mediante nueva licitación. Pero fue modificado de modo que al concluir la concesión el próximo adjudicatario debería pagar al contado el valor de la empresa en marcha al anterior concesionario. Si el oferente fuera primer concesionario sería eximido de depositar el precio del valor de la empresa en marcha, “ventajas superlativas que desalentarán a otros oferentes”. De no realizarse la nueva licitación, el precio de la empresa en marcha debería pagarlo al concesionario la provincia, aunque la ley 5507 prohíbe en su artículo 2º que el Estado indemnice. De este modo, el adjudicatario “ya tiene asegurada una indemnización al finalizar la explotación”.

En cambio en la primera licitación el Estado provincial no percibe nada por la entrega como empresa en marcha del Hotel Plaza y de su casino, que arroja un beneficio anual de 13 millones de dólares.
En la presentación que los empleados Sánchez y Fronceda hicieron al mismo tiempo al senado provincial, además de las condiciones de la licitación se analiza la composición accionaria de los adjudicatarios, Nuevo Plaza Hotel Mendoza Limited. Sus accionistas en partes iguales son la empresa panameña Elegant Glance y Mendoza Investment Company Limited, de las islas Cayman, controlada por Hyatt International Corporation. El balance presentado por el adjudicatario indica que su patrimonio es de 30 millones de pesos. Ellos se componen de apenas 20.000 acciones de un peso cada una emitidas y en circulación y de un “capital integrado adicional” de 29.980.000 pesos, en dos pagarés de 14.990.000 pesos cada uno, pertenecientes a Elegant Glance y Mendoza Investment.

En la documentación presentada figuran como miembros de la Junta Directiva de Elegant Glance Samuel, Susana y Guillermo Liberman, cuya nacionalidad, número de documentos y estado civil no se detallan. La sociedad tiene domicilio en Panamá y sólo están identificados los poseedores de dos de sus 500 acciones sin valor nominal, ambos ciudadanos panameños. El aporte de 14.990.000 pesos se realizó mediante un contrato de depósito de garantía en sobre cerrado (escrow), ante la offshore panameña de la Banque Nationale de Paris. Elegant Glance es el depositario, Nuevo Plaza Hotel Mendoza Limited el beneficiario y el banco panameño el agente de la garantía.

El contrato presentado a la licitación establece obligaciones a cumplir por las tres partes, pero en la documentación licitatoria sólo están identificados los firmantes por el banco panameño. Los denunciantes destacan que el adjudicatario de la licitación, Nuevo Plaza Hotel Mendoza Limited, “presenta el contrato como pagaré a cobrar, por ser el beneficiario, pero no lo firma, es decir que no se obliga a cumplirlo, no da conformidad a sus cláusulas”. Esto hace que el patrimonio del adjudicatario se reduzca a la mitad de lo declarado. “¿Cuál será el origen de esos fondos?”, preguntan los denunciantes. El otro pagaré, por el mismo monto, surge de un contrato similar de depósito con garantía entre Hyatt International Corp, su controlada Mendoza Investment y el US Bank National Association.

Por Hyatt International firma su vicepresidente de finanzas, Leonard Stoga, y por el banco una persona no identificada, de la que no se conocen nombre ni número de documento de identidad. Así, “no hay constancia alguna en el expediente que certifique que quien firmó como depositario sea funcionario de la entidad bancaria. Esto motiva que tampoco se tenga certeza de que ese dinero se encuentre depositado como expresa el contrato”. 

Artes de adivinación La licitación también requería referencias bancarias del adjudicatario. Nuevo Plaza Hotel Mendoza Limited presentó un fax del “Bankamerica Trust and Bank Corporation Limited” de las islas Cayman, que recomienda tratar con toda confianza con “nuestro apreciado cliente”, ya que “ha mantenido sus cuentas en forma satisfactoria”, pero aclara que la referencia se otorga “sin responsabilidad alguna de quien la redacta, de esta institución o de sus funcionarios”. Tanta prudencia es comprensible: según el mismo fax, la cuenta del Nuevo Plaza Hotel Mendoza fue abierta en junio de 1998, un mes antes de la carta de recomendación, fechada el 24 de julio. Como para que no queden dudas de la seriedad de todo el trámite, la traductora Irma Ester Cohen firmó la traducción de este documento en Buenos Aires el 20 de julio de 1998, cuatro días antes de la redacción del documento en las islas Cayman. Este anacronismo o adivinación, según se mire, fue descubierto al revisar el expediente por el periodista mendocino Eduardo Pavese, quien también lo denunció a la Justicia.

El Comité Ejecutivo se limitó a requerir a los oferentes que pidieran a los bancos de Panamá y Cayman información sobre las empresas que firmaron esos contratos y sobre sus sistemas de detección de dinero proveniente de actividades ilícitas. “Ningún lavador de dinero va a confesar que sus depósitos bancarios provienen de actividades ilícitas. Si realmente querían saber el origen de los fondos deberían haber solicitado informes sobre los oferentes y las empresas que se vinculan a ellos, a los gobiernos de los países en donde se han constituido, al FBI y a la DEA”, dicen los denunciantes.

Mendoza Investment se constituyó en las islas Cayman el 28 de mayo de 1998, y su estatuto sólo le permite operar fuera de ese territorio británico. Por mera casualidad, al día siguiente de su constitución, el 29 de mayo del año pasado, se distribuyó en Nueva York el informe preliminar sobre “Paraísos financieros, secreto bancario y lavado de dinero”, del programa de prevención global contra el lavado de dinero, de la oficina de las Naciones Unidas para el Control de Drogas y Prevención del Delito. Uno de sus autores es Jack Blum, quien tuvo a su cargo las investigaciones del Senado de los Estados Unidos sobre el affaire Irán. Contras y sobre el BCCI de Gaith Pharaon.

Al describir el procedimiento típico de los lavadores de dinero, el informe de las Naciones Unidas menciona a las islas Cayman, las islas Vírgenes Británicas y Panamá como los santuarios favoritos para registrar una empresa offshore, “con autorización para realizar negocios sólo fuera del país de creación”. Una vez establecida la empresa en la jurisdicción offshore, añade, “se efectúa en su nombre un depósito, preferentemente en una cuenta con la identidad de su titular protegida por las leyes de secreto empresarial. De ese modo, entre el lavador y las autoridades median un nivel de secreto bancario, un nivel de secreto empresarial y posiblemente la protección adicional del secreto que privilegia la relación abogado-cliente”.

Las islas Cayman, añade Blum, son una de las jurisdicciones offshore más importantes y el quinto centro financiero del mundo, sólo superado por Londres, Nueva York, Tokio y Hong Kong. En su minúsculo territorio operan 570 bancos, con depósitos que superan los 500 mil millones de dólares. Según el informe de las Naciones Unidas los casinos son “vehículos ideales para el lavado de dinero por las grandes cantidades de efectivo que mueven sin registro. Ese efectivo puede depositarse como si fueran ganancias” sin llamar la atención. Por eso “es esencial que la industria del juego sea regulada en forma más cuidadosa”, que antes de otorgarse una licencia “se acrediten la identidad y la buena fe de sus propietarios” y que su actividad sea supervisada de modo de comprobar “si los negocios realizados guardan relación con el efectivo depositado”.

El casino puede lavar o ayudar a que otros lo hagan. El informe recoge el testimonio de un participante en las maniobras: “Tomás un buen toco de plata. Comprás unas fichas y vas a jugar un rato. Ganes o pierdas, da lo mismo. Entonces devolvés las fichas y a cambio te dan un cheque al portador de un banco en los Estados Unidos. La suma que ya está preparada se denomina ganancias al casino. Nadie mira nunca los libros para ver de dónde viene ese dinero lavado, y mucho menos en qué cantidad”. Las oportunidades para el lavado “son muy grandes. Aunque los vínculos entre bancos y casinos no siempre son fáciles de detectar, su proximidad así como la falta de una supervisión rigurosa o un control externo de los casinos los convierte en instrumentos ideales para completar el círculo del lavado de dinero”, dice el informe.

“Nombres similares”

El banco que los expertos de las Naciones Unidas ponen como ejemplo es precisamente el BCCI de Gaith Pharaon. “Desde el comienzo se compuso de múltiples capas de entidades, relacionadas entre sí a través de una serie impenetrable de holdings, empresas afiliadas, subsidiarias, bancos dentro de bancos, transacciones internas y testaferros. Fragmentando su estructura organizativa, sus registros, revisiones regulatorias y auditorías, la compleja familia de entidades del BCCI era capaz de evadir las restricciones legales comunes en el movimiento de capital y de bienes”. De este modo, “pudo cometer o facilitar una diversidad de delitos a través de diferentes métodos, incluidos el uso de empresas pantalla, la explotación de centros financieros offshore y santuarios con secreto bancario y la diversificación de su estructura corporativa. Esa complejidad iba acompañada de influencias políticas de alto nivel”.

El BCCI usaba las islas Cayman y las Antillas Holandesas para crear un laberinto de compañías de paja que ofrecían un muro de secreto sobre sus depositantes y actividades. Las Naciones Unidas mencionan un grupo de compañías que lavaron unos 150 millones de dólares “usando empresas ficticias de Panamá, las islas Cayman y la isla de Man. El fruto del tráfico de drogas regresó a Colombia a través de compañías de paja creadas para recibir inversiones extranjeras. Esas compañías fueron bautizadas con nombres similares a los de grandes firmas multinacionales. Una red denominada Mobil Ami fue utilizada para procesar substanciales “inversiones extranjeras” que en un lapso de cuatro a seis meses incluyeron más de 178 millones provenientes de Panamá y 121 millones de los Estados Unidos”.

Ni la embajada de Estados Unidos ni la jefatura de gabinete de ministros parecían conocer esta técnica de los “nombres similares a los de grandes firmas multinacionales” cuando contestaron los respectivos pedidos de información del Frepaso acerca del Exxel Group, de Juan Navarro, y Citiconstrucciones, del banquero en dificultades Raúl Moneta. En las Islas Vírgenes Británicas fue constituida otra empresa fantasma con negocios en Mendoza: United Finance Corporation (UFCO), luego convertida en República Holding, que controla a través de Moneta al Citicorp Holdings, CEI. En esta materia no parece haber grandes diferencias entre las líneas internas del partido gobernante.

El mes pasado, una declaración firmada por quien Eduardo Duhalde anunció como su hipotético futuro ministro de Economía, Jorge Remes Lenicov, sostuvo que “sería un grave error colocarles controles a los fondos tipo Exxel o CEI”. Admitió que “no se conoce con exactitud el origen de estos capitales”, pero se sabe que “favorecen la tasa de crecimiento”. Según Remes, “si nosotros colocamos controles, habrá otros estados que no lo harán y les permitirán invertir en sus mercados. Tampoco veo problemas graves en reconocer que una parte de ese dinero proviene de los paraísos fiscales”.

En dos meses nos vemos

El operador del Casino presentado por el adjudicatario también está controlado por Hyatt International de las islas Cayman. Se trata de un conjunto de empresas: Regency Casinos Holding Limited, Regency Casinos Thessaloniki y Regency Casinos Mendoza Limited. Esta última fue creada en junio de 1998, con el sólo objeto de participar en la licitación, por lo que no tiene antecedentes en la administración de casinos. Los balances presentados por las dos primeras arrojan pérdidas. Regency Casinos Thessaloniki perdió 200.000 dólares en 1995 y ganó 115.000 en 1996, su balance acusa un capital accionario de 20.000 dólares y recibió un préstamo a largo plazo por 200.000. Regency Casinos Holding Limited, perdió 12.000 dólares en 1996 y 13.000 en 1997. Según el informe del auditor independiente Arthur Andersen incorporado al expediente licitatorio, el patrimonio negativo de la sociedad “genera fuertes dudas respecto de su capacidad de seguir operando”.

Casinos que pierden plata son de inmediato sospechosos de derivar fondos con otro destino. Lejos de practicar el control especial que recomiendan las Naciones Unidas, el pliego de la licitación para el casino de Mendoza delega en el concesionario el mecanismo para impedir el lavado de dinero. En un Registro de Transacciones Múltiples, donde se ingresarán los datos de los clientes cuyas apuestas o ganancias lleguen a 10.000 pesos, se les tomarán fotografías cuando pasen de los 30.000 pesos y no se les pagará si se niegan a identificarse. Con tal sistema, dicen los denunciantes, la adjudicataria podrá manejar a su gusto los resultados del casino, sobre los cuales se calculará el canon y los impuestos a pagar.

“Esto es así porque el artículo 24 del contrato dispone que el control de rutina será bimestral, realizado por inspectores de la Subsecretaría de Turismo (sic) de la Provincia” y no por el Instituto Provincial de Juegos y Casinos, como correspondería por la ley 6362. Según los denunciantes “los que conocemos el manejo de un casino sabemos que existen diversas formas de que aparezca con pocas utilidades o con pérdidas en la contabilidad, aunque produzca jugosas ganancias. Estas maniobras se facilitan cuando se legaliza el descontrol. También se facilita el lavado de dinero cuando el Estado no toma medidas severas de control sobre la explotación de grandes hoteles con casino. Jamás un casino puede controlarse cada dos meses. El control debe ser diario”.

Las huellas del faraón

Un hotel Hyatt se edificó en Buenos Aires, en los albores del menemismo. La inversión fue realizada por el millonario egipcio de nacionalidad saudita Gaith Pharaon, con el asesoramiento financiero de Javier González Fraga y la chapa política de Alberto Kohan, quien lo introdujo en el despacho presidencial. Todavía está abierta la causa por lavado de dinero en que la jueza María Servini investiga esa operación. Según el fiscal del distrito de Columbia, el Banco de Crédito y Comercio Internacional de Pharaon (BCCI) reciclaba dinero de vendedores e importadores de drogas.Pero la causa norteamericana se paralizó cuando dos hijos del ex presidente George Bush aparecieron vinculados con una compañía petrolera de Pharaon. Una de las curiosidades del expediente argentino es una foto secuestrada en un allanamiento a las oficinas de Pharaon en Paris, en la que el magnate saudita se abraza con el hombre que, en 1997, gestionaría la adopción de las empresas de Alfredo Yabrán por el Grupo Exxel: Terence Todman. 

Siguiendo esa pista, la jueza Servini llegó en 1994 a las oficinas de Merrill Lynch en el edificio de Rincón 467, en Montevideo, propiedad del jefe de la logia P2, Licio Gelli. Antes había funcionado allí la filial uruguaya del banco de Pharaon quien, según indicios de la causa tendría intereses significativos en Merrill Lynch. En el despacho del presidente de Merrill Lynch aparecieron una serie de cuentas numeradas y también la clave para decodificarlas. Se trataba de una nítida triangulación: fondos negros de la Argentina depositados en un paraíso fiscal a través de Merrill Lynch Private Capital de Grand Cayman, que luego se transfieren a Wall Street y, ya lavados, regresan al Río de la Plata a través de Merrill Lynch de Luxemburgo para ser invertidos como respetables capitales extranjeros en YPF, Edenor, Edesur, Telecom, Telefónica, Banco Santander y las brasileñas Telebras y Rio Doce.

La Corte Suprema uruguaya ordenó suspender el allanamiento iniciado por la Justicia oriental a pedido de la jueza argentina, y los investigadores no pudieron conservar la documentación secuestrada ni las anotaciones que habían hecho, por lo cual debieron reconstruirlas de memoria. El presidente de la entonces consultora Merrill Lynch del Uruguay tiene otro apellido notorio: era Wilfredo Bunge, hijo de Wenceslao Bunge, el ex vocero de El Señor Yabrán.   

Fuente: RECOSUR







                                EL FANTASMA DE YABRAN



ECONOMÍA

29 NOV 2012 01:17h

SAMUEL LIBERMAN PREVÉ INVERTIR US$ 600 MILLONES

Un argentino, al frente del mayor proyecto inmobiliario en Punta

Quienes conocen al empresario Samuel Liberman aseguran que “todo lo hace a lo grande”. Por eso, el ex propietario de la empresa de cable VCC está dispuesto a realizar la inversión más importante de la historia de Punta del Este . Tiene previsto construir un megacomplejo turístico-comercial en la zona de Maldonado, con una inversión de US$600 millones. Según informó el diario El País , el proyecto fue presentado a nombre de las empresas Sociedad Latinoamericana de Inversiones (Grupo SLI) y Altius Group, ambas propiedad del Liberman. Aparentemente, la intendencia de Maldonado ya aprobó el emprendimiento y sólo resta que la Junta de la zona se pronuncie, algo que sucedería durante diciembre, según indicó ese medio. También señaló que los representantes del Frente Amplio y el Partido Nacional, dos de las agrupaciones políticas mayoritarias del Uruguay, ya anunciaron que votarán el proyecto.
De aprobarse, la obra consistiría en un espacio de 63 hectáreas donde se construiría un complejo hotelero y un barrio privado con actividad comercial y educativa en la zona de la mansión Charrúa Hills, propiedad del empresario. La ubicación exacta es entre la avenida Aparicio Saravia y la avenida Aiguá, al este de El Jagüel.
No sería la primera inversión del empresario en el país vecino. Hace algunos años, construyó departamentos en Maldonado y también compró el Hipódromo Maroñas de Montevideo, que luego cerró. Actualmente, Liberman es socio de la cadena Hyatt en varios hoteles y casinos de Panamá y Brasil, más otro que se abrió en la provincia de Mendoza, en 2001. Allí, también posee viñedos y olivares, al igual que en La Rioja.


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Investigacion

¿Yabrán está vivo? Todos los indicios que mueven a la sospecha

UNA HISTORIA QUE MERECE SER INVESTIGADA

¿Yabrán está vivo? Todos los indicios que mueven a la sospecha
Todo empezó a través de una noticia de la sección “policial”, aparentemente desvinculada con el tema Yabrán. Fue el 14 de enero de 2002, cuando un matrimonio y sus cuatro hijos desaparecieron repentina y misteriosamente en el departamento entrerriano de Nogoyá. A pesar de que fueron buscados por la policía en diversos rastrillajes —ante la sospecha de que pudieran haber sido asesinados y enterrados en esa zona— nunca aparecieron.
El hecho ocurrió en la estancia La Candelaria, a unos 70 kilómetros al este de la capital entrerriana y fue investigado por el juez de Instrucción Sebastián Gallino, quien siempre sospechó que José Rubén Gill, su esposa y sus cuatro hijos pudieron ser víctimas de un múltiple homicidio.
Basándose en esa noticia, una fuente de información de mediana relevancia dio el puntapié inicial: “Una familia de puesteros en la estancia llamada ‘La Candelaria’ tuvo la desgracia de verle la cara de frente y en persona, imprevistamente, a Don Alfredo Yabrán y hoy los seis duermen plácidamente en el fondo de un aljibe. Todos lo saben y están aterrados porque fue un escarmiento para todo el pueblo.  Es sabido: los muertos no hablan, y mejor que los vivos tampoco (dice el apotegma de la cosa nostra)”.
Oportunamente, periodistas de este medio intentaron chequearlo con suerte dispar: si bien algunos vecinos reconocieron que esa historia circulaba por las calles de Nogoyá, nadie pudo dar detalles concretos al respecto. Por tal motivo, nunca se siguió con el tema ni se publicó nada en Tribuna de Periodistas.
Sin embargo, no es un mal disparador para volver a analizar las dudas respecto a la real desaparición de Yabrán, algunas de las cuales fueron planteadas por el director Ejecutivo de este medio en un interesante artículo y en su libro La larga sombra de Yabrán, publicado en 1998.

El “plan de fuga” de Yabrán

Uno de los que planteó enormes interrogantes y aportó buena data al respecto en su momento, fue Miguel Bonasso, quien escribió a pocos días de la desaparición de Yabrán una trama espeluznante:
“Don Alfredo pensaba estar prófugo en el Uruguay el viernes pasado, pero no le dieron tiempo. Al margen de las dos cartas conocidas e integradas al expediente, habría escrito otras cuatro misivas, para su mujer y sus tres hijos que envió, en mano, con Leonardo Aristimuño, un joven de 25 años que gozaba de su confianza. En setiembre pasado, Alejandro Vecchi, abogado de la familia Cabezas, acusó al citado Aristimuño de haberle ofrecido 100 mil pesos para que dejara la causa por el crimen del fotógrafo. En estos mensajes que Yabrán mandó a su familia y no están integrados a la causa, el empresario les habría pedido perdón a los suyos por la situación judicial en que se encontraba. También les rogó que no las leyeran hasta el viernes 22, en que esperaba haber cruzado la frontera. Cuarenta y ocho horas después de un suicidio en el que aparentemente no pensaba el domingo 17, cuando las escribió. Un dato alucinante que puede abrir nuevas perspectivas a una investigación que ayer parecía encaminarse al carpetazo final. Consultado por este diario, el ex vocero del empresario postal Wenceslao Bunge reconoció ayer la existencia de "al menos una carta" dejada en Buenos Aires a sus parientes más íntimos, que debería ser abierta recién el día 22.
La información sobre el presunto ‘plan de fuga’ de Yabrán aparece hoy como nota de tapa en el semanario Análisis de Paraná. Fue escrita por el director de la publicación Daniel Enz, quien anticipó su contenido a Página/12 en forma exclusiva. Este cronista la pudo complementar con otros datos sugestivos que la jueza de Gualeguaychú, Graciela Pross Laporte, conocería pero aún no ha hecho públicos. En primer lugar, se habrían encontrado dos camionetas 4 por 4 escondidas en los galpones de la estancia. Una tercera, como ya se ha informado, se habría alejado del casco central cuando los policías iniciaron el procedimiento. La presencia de tres camionetas indicaría que el empresario, contrariamente a lo que se creía y se dijo, habría contado en el lugar con unos cuantos custodios. Una alta fuente judicial de Concepción del Uruguay confirmó a este diario que en San Ignacio se encontró un equipo de comunicación satelital computarizado de última generación, con el que se pueden eludir las clásicas pinchaduras telefónicas y el temido Excalibur. El equipo estaba guardado en una valija y la juez Pross Laporte lo sabe pero no lo dio a conocer. Ambos hallazgos tornan poco explicable la anunciada decisión de ir cerrando la investigación en torno a una muerte que para la magistrada ya sería, inequívocamente, un suicidio.
La juez también debería investigar la información contenida en la crónica de Daniel Enz, que está basada en las averiguaciones que el periodista realizó en Gualeguaychú, Concepción del Uruguay y Larroque y en donde se narran las horas finales de Yabrán desde la proximidad de los más íntimos. El viernes 15 de mayo Papimafi llegó a San Ignacio con su hermano el Toto (José), que era quien administraba varios de sus campos de Entre Ríos a través de la empresa agropecuaria Yabito. El Toto estaba obviamente preocupado e insistía en acompañarlo, pero Yabrán le dijo que se fuera que todo estaba bien, en manos ‘del Gordo (Pablo) Argibay (Molina)’. Dos semanas antes, cuando ya estaba en franca declinación pero todavía no le habían dictado la captura, Yabrán había visitado otra de sus estancias entrerrianas, La Selmira, ordenándole al administrador que echara a todo el personal, que pensaba reemplazar por gente de su confianza si se veía obligado a usarla como escondite. Cuando se decidió por la más recóndita San Ignacio repitió el esquema y se desprendió de los antiguos caseros. Fue su primer error, porque la pareja, resentida por el despido, columbró la verdad y empezó a esparcirla en el ámbito pueblerino de Aldea San Antonio.
El segundo error (garrafal) habría sido el del capataz Gervasoni, que habló de más en la carnicería del pueblo: ‘Deme la mejor carne, porque mañana llega el patrón’. ‘Don Alfredo’, como le decían en esos pagos, no llegó solo: en el casco principal se instalaron con él Aristimuño y su mujer y en la casa anterior Gervasoni y su esposa. En principio se pensaba que había, además, dos custodios, pero es posible (por el dato de las 4x4) que hubiera más. Disponían de cuatro teléfonos celulares y el sofisticado aparato satelital que sólo usó Yabrán y en el cual la investigación judicial podría encontrar un registro de las últimas llamadas efectuadas por el presunto suicida. Que, en general, trató de no hablar. Con excepciones como el llamado a Héctor Colella para que se ocupara de la familia.
En la noche del domingo Yabrán le pidió a Leonardo Aristimuño que le llevara las cartas para su mujer y sus hijos. Según afirma el cronista entrerriano, ‘no eran despedidas’. ‘Yabrán pedía `perdón` a sus seres queridos por la situación que les estaba haciendo pasar y les solicitaba cierta paciencia para lograr el encuentro. Sus familiares tuvieron esas cartas en la mañana del lunes 18. Yabrán les pidió que las abrieran `el viernes`, no antes’. Ese mismo lunes, uno de los custodios de Papimafi se conectó con un oscuro personaje de Gualeguaychú que conoce profundamente la zona fronteriza con el Uruguay y le preguntó qué posibilidades tenía para cruzarlo en una embarcación hasta el cercano Uruguay. El misterioso baqueano —que alguna vez fue informante de la policía entrerriana— habría respondido ‘muchísimas’, poniendo una sola salvedad: que tendrían que bordear la estancia El Potrero, del secretario de la SIDE, Hugo Anzorreguy, donde habría personal de custodia. Si había problemas, habría dicho el contrabandista de hombres, podía esconderse ‘en un islote que hay en el medio’. La idea era cruzar a la pequeña localidad de Nueva Berlín, la misma que se hizo famosa por la caída del avión de Austral.
Pero el cerco se estaba cerrando. El sábado 16, a las ocho de la noche, ‘el jefe departamental Alloati, el subjefe Cabrera y el director de Investigaciones, comisario principal Alberto Ceves, se presentaron en el despacho de la jueza de instrucción de Concepción del Uruguay María Cristina Calveyra y le dieron dos noticias: que habían recibido un fax del juez de Dolores José Luis Macchi solicitando la captura del Yabrán y que les habían pasado el dato de que el empresario postal se encontraba ‘en la zona’, en su estancia La Selmira.
La doctora Calveyra ‘libró la orden de allanamiento pero el resultado fue negativo’. El domingo los policías regresaron con ‘la precisa’: Don Alfredo estaba en su nueva estancia de San Ignacio. Ese mismo día el vecino de Yabrán, Anzorreguy, habría recibido el mismo dato. ‘Calveyra quiso tomarse unas horas para analizar la situación’. En ese lapso un policía la llamó al teléfono celular y le contó que uno de los peones del empresario postal se había ido de lengua en la carnicería de Aldea San Antonio. ‘Recién el martes a la noche —escribe Daniel Enz— los policías pudieron llevarle el dato exacto a la jueza.’ Pero había un problema de jurisdicción porque la mayor parte del campo estaba en el departamento Uruguay y el casco principal en el Departamento Gualeguaychú, bajo la jurisdicción de la doctora Gross Laporte, a quien Calveyra llamó de inmediato para anunciarle que le mandaba el correspondiente exhorto.
La respuesta no le llegó durante el día. Recién a la noche pudo ubicar a su colega, que vive fuera del radio urbano de Gualeguaychú. Pross Laporte le hizo una observación: ‘No consignaste en manos de quién quedaría Yabrán si aparece allí’. Y entonces decidieron dejar las actuaciones para el día siguiente. Esa misma noche, mientras tanto, el prófugo escribió las otras dos cartas que se conocen, dirigidas respectivamnte al ‘señor juez’ y a su secretaria privada. ‘Eran las ocho del miércoles cuando sonó el teléfono de la jueza Calveyra. `Doctora, la tarea que se hizo es buena. Confíe en nosotros. Está en San Ignacio. Hasta pudimos verlo, indicó uno de los oficiales. Los policías ya habían solicitado refuerzos a Colón y San Salvador. Pross Laporte también envió una comisión policial. Eran cerca de las doce cuando los policías estuvieron en la estancia San Ignacio.’
A partir de allí la crónica regresa a las instancias más conocidas (aunque no más claras) del allanamiento de la casa rosa y el momento del escopetazo. Que aún no se sabe con certeza si fue presenciado o no por el comisario principal Ceves. En una de las tantas incógnitas que el cierre apresurado de la investigación podría dejar libradas a la suspicacia de una sociedad que tiene buenas razones para desconfiar.”

Más puntos oscuros

Cuando la investigación por la muerte de Yabrán estaba a punto de cerrase, otro periodista, esta vez Andrés Klipphan, planteó más interrogantes:
“La investigación sobre la misteriosa muerte en la estancia de San Ignacio se cerrará cuando la jueza de Gualeguaychú termine de acreditar, en forma científica, que el cuerpo encontrado es el de Alfredo Yabrán y que Alfredo Yabrán se quitó la vida en forma voluntaria. La pesquisa no avanzará sobre puntos oscuros que deberían ser abordados por la jueza Graciela Pross Laporte, máxime cuando la muerte del empresario no es una muerte común, sino prácticamente una cuestión de Estado. El dueño de Yabito, por otra parte, era sospechoso de haber ordenado el crimen de José Luis Cabezas y tenía orden de captura internacional. Las posibilidades de quedar preso hasta el juicio oral eran muchas. Yabrán tenía aceitadas relaciones tanto con importantes jefes de la UCR, como con funcionarios, ex funcionarios y parientes del presidente Carlos Menem. Algunos de los interrogantes que se detallan fueron planteados desde el despacho del juez del caso Cabezas. Página/12 detalla los más relevantes:
* Con quién habló Yabrán desde la estancia San Ignacio y desde la estancia La Selmira. En el primer lugar había un teléfono de línea común, pero hasta ahora no apareció la valija con el teléfono satelital desde el cual se comunicaba con sus allegados. En la segunda propiedad se secuestró uno de sus teléfonos celulares. Pross Laporte ya le anticipó a este diario que no pedirá el listado de llamadas. Anoche José Luis Macchi evaluaba la posibilidad de pedir él esa medida.
* Desde el entorno del empresario trascendió —este hecho no pudo ser confirmado— que los días previos a su muerte escribió notas en varios cuadernos de ‘tapa blanda’. Ese material no fue encontrado en el casco de la estancia. Tampoco el bolígrafo negro con la cual escribió las dos cartas que están en poder de la Justicia. La jueza sólo encontró una lapicera de tinta azul.
* Puesteros de la zona le contaron a Página/12, con nombre y apellido, que en días previos al supuesto suicidio había un intenso movimiento de camionetas doble cabina y vidrios polarizados, además de ‘caras extrañas’, en San Ignacio.
* Los 18 patrulleros de policías entrerrianos casi se chocan con un auto en el que iban dos personas cuando ingresaban a la propiedad con el objetivo de apresar al fugitivo. Nadie los detuvo.
* Dos fuentes seguras le confiaron a este diario que agentes de la SIDE estaban en la zona y sabían la ubicación del prófugo.
* ¿Por qué razón, a los minutos de conocerse la noticia del supuesto suicidio de Yabrán, a través de Crónica TV, el comisario Víctor Fogelman, —el principal investigador del Caso Cabezas— llamó al periodista de TN Antonio Fernández Llorente para comunicarle que en el allanamiento de San Ignacio ‘no participaban policías bonaerenses’?
* En la misma comunicación, Fogelman reveló que sus pesquisas no estaban en Gualeguaychú porque estaban a punto de viajar al Uruguay. Según Fogelman, ‘tenían el dato’ de que Yabrán podría estar en ese país.
* Si el operativo de allanamiento dispuesto por la Justicia de Entre Ríos era secreto, ya que la intención era capturar a un prófugo, ¿por qué se permitió que la emisora de Gualeguaychú AM 660, LT41 transmitiera en vivo y minuto a minuto las alternativas del hecho? El relato del periodista Manuel Lazzo —este diario accedió a la grabación radial— fue impecable. Por ejemplo a las 13.30 (Yabrán se habría suicidado a las 13.10) el periodista, ubicado a más de mil metros del casco de la estancia, le contó a su audiencia: ‘Aquí está pasando algo. No creo que sea Yabrán, pero seguro que es algo vinculado a la causa. A los policías se los nota nerviosos’.
Yabrán estaba escuchando esa emisora. ¿Por qué no se escapó? ¿Es cierto que su familia estaba amenazada? ¿Y si es así, quiénes y por qué la amenazaron? Esta versión fue difundida por Pablo Argibay Molina, uno de los abogados del empresario. La jueza dice estar convencida de que Yabrán no fue instigado al suicidio. La familia también. Si Pross Laporte sospechara lo contrario la carátula sería ‘averiguaciones por el posible asesinato de Alfredo Yabrán’. Una hipótesis abonada por los pesquisas del caso Cabezas”.

Concluyendo

A las dudas planteadas por ambos periodistas, se suman otros elementos que fueron apareciendo en los últimos años:
-Fotos de un hombre igual a Yabrán, en una playa de Cuba, en mayo de 1999, después de que este se hubiera supuestamente suicidado. Fueron publicadas por revista Veintitrés (en esos días perteneciente a Jorge Lanata).
-El testimonio de ex empleados de Don Alfredo que aseguran que este cruzó a Brasil el 20 de mayo de 1998.
-El acta de defunción de Yabrán con el nombre cambiado. En lugar de “Alfredo” dice “Alberto”. Otro dato: esa parte está borroneada.
 
-La aparición de correos electrónicos enviados a Wenceslao Bunge por un tal Carlos Nallib, hablando de “los negocios pendientes” y con el mismo lenguaje que Don Alfredo. Dos datos: el tercer nombre de Yabrán es Nallib y Bunge era su vocero.
-La aparición de una huella digital en el marco de una operación inmobiliaria a nombre de Yabrán. Nunca se pudo determinar si la huella era o no de este.
-El testimonio de una mujer que aseguró haber visto al empresario en Pinamar en 2008. Jorge Asís lo contó en su momento con lujo de detalles, aunque retocando ciertos nombres.
 En fin, todo lo antedicho no prueba que Yabrán esté vivo, pero forman parte de una espectacular trama que merece ser repasada en vísperas de unas fiestas que carecen de información de relevancia.

Equipo de Investigación de Tribuna de Periodistas